Tenía cosa de dos o tres años de edad cuando leí "Donde viven los monstruos", pero como no me gusta ser nostálgico sino fantasioso y también inclinado al misterio, solamente quiero decirte que te sacaste un cien en el personaje principal y su voracidad de aventuras.
Yo también gustaba de echar mi mente a volar y eso hizo de mi un trastornado. No tuve mucha alternativa, tomando en cuenta que al igual que tú, yo también fui un niño muy enfermizo y dado a lo prohibido en lo que se refiere en cuestiones literarias.
Como sea tu obra no influyó a mis ambiciones líricas, aunque te debo la verdad: sí quiero ser escritor de literatura infantil. ¿Qué demontres tiene que ver que mi ejemplar de tu libro más difundido haya sido arrebatado incontables veces de mis infantiles manos?.
Nuestros deseos siempre terminan prevaleciendo si somos valientes, pacientes y tratamos de amar la VERDAD.
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